jueves, 30 de junio de 2011

Editorial

¿Adornos diabólicos u originales?

            Son muchas las formas que hoy en día emplean los jóvenes para destacarse del resto por diversas razones; unas ligadas íntimamente al deseo de aceptación por parte de otros, así como también por complejos de inferioridad. La juventud siempre ha buscado la manera de distinguirse,  creando grupos que los aparta del resto. Cabe destacar que cada grupo social guarda en la mayoría de los casos  sus costumbres, creencias y hasta en cierto punto, su propio estilo de vestir. El uso de tatuajes, pircings, e incrustaciones en la piel son los temas que abarcaremos en esta oportunidad.

            Agujas, colores, pieles, y técnicas, conforman parte  del mundo de amigo de kelvis quién desde hace unos años, es tatuador en la ciudad de Caracas, aparte de ejercer este oficio se considera “amante de este arte”, lo que en su piel es evidente. Amigo comenzó a tatuarse de muy chico y hacerlo para sus clientes representa más que un trabajo, un hobbie en el que se ha venido desempeñando a pesar del señalamiento por parte de los que viven en desacuerdo con esta práctica, “siempre va haber alguien que no le gusta lo que haces”, afirmó.

            La iglesia es una de las instituciones que califica a las personas tatuadas como personas no gratas, basadas en escrituras bíblicas encontramos “no se hagan heridas en el cuerpo por causa de los muertos, ni tatuajes en la piel. Yo soy el Señor” (Levítico 19:28 NVI). Es esta una prueba que data de muchísimos años en donde se demuestra la discriminación, creando controversia en personas que muy interiormente se tatúan por sacrificios o bendiciones recibidas del “Dios Padre”.


Por otra parte tenemos jóvenes que además de hacerse dibujos en la piel, se colocan accesorios llamativos, en distintas partes del cuerpo no necesariamente visibles. Los que realizan este tipo de actividades, lo hacen con el fin de diferenciarse de los demás, otros como una vía de expresión, o simplemente como un hobby.

            Por muy sencillo que parezca el añadirse cualquiera de las dos cosas ya mencionadas (tatuajes y piercing), no lo es; ya que como todo lo que existe en el mundo, necesita de personas que sepan hacer estas prácticas de forma adecuada y bajo las reglas sanitarias, ya que quizás el motivo por el que es rechazado por algunas personas, es por las distintas enfermedades que se pueden transmitir si se hacen de forma inadecuada.

La imagen física es de gran importancia para el hombre. Algunos deciden transformar su aspecto a través de cirugías estéticas para mejorar la anatomía del cuerpo humano. Sin embargo, diversos grupos buscan el aislamiento del “mundo real” para refugiarse a lo que llaman “libertad”. Cachos en la frente, objetos bajo la piel, tatuajes y perforaciones forman parte de los grupos o tribus que pertenecen a las “expresiones artísticas corporales”. José Segovia promueve dicho movimiento. Afirma sus habilidades sobre el tatuaje, el afán por las perforaciones, la pasión por el pensamiento creativo y las huellas que dejan cada uno de los procedimientos.


             Muchas personas asumen que estos tipos de prácticas son algo malo, pues no siempre, porque no vaya a la par de nuestras creencias son estrictamente perjudiciales. Creemos fielmente que mientras no dañe a terceros, se debe respetar las decisiones de cada quien.

"El que esté libre de pecado que tire la primera piedra"

No hay comentarios:

Publicar un comentario