Exorcismos, Posesiones satánicas
A lo largo de los siglos y hasta el presente, el fenómeno de la posesión satánica es un asunto que aterroriza, cautiva e interesa a la sociedad del mundo occidental y pone en evidencia las difíciles relaciones entre ciencia y religión.
¿Has escuchado algo sobre exorcismos? ¿Te has preguntado si es verdad o una invención cinematográfica?
Pues déjenme comentarles que yo me hice la misma pregunta y no quise quedarme con la duda, por lo que acudí a expertos en la materia, la iglesia católica.
Me dirigí entonces, a la iglesia de Montalbán en Caracas, al mediodía y pedí hablar con el padre Carlos, quien se negó a concederme la entrevista, pero tras esta dificultad, otro miembro de la iglesia, gentilmente me atendió.
Como dato curioso, quisiera comentarles que aun cuando mi cámara de video estaba funcionando a la perfección antes de entrar al recinto, cuando quise disponerme a grabar, la misma no quiso encender. Igualmente llamativo es que cuando encendí mi grabador de voz para registrar la entrevista, al momento de reproducirla, noté que no se había grabado nada.
Después de indagar en la red y conversar con el sacerdote Marcos, no conseguimos casos “conocidos” en Venezuela, mas sin embargo en la red pueden conseguirse casos cercanos en Latinoamérica, muy cerca de nuestras latitudes.
Tal es el caso de una niña colombiana que adoptó un comportamiento extraño y fue atada a su cama. Según su mamá la niña estuvo experimentando con la ouija y estaba poseída por el demonio. Sin embargo los médicos que se acercaron a su domicilio pensaron que podría tratarse de alguna enfermedad psicológica.
Un caso bastante emblemático de supuesta posesión es el de Anneliese Michel , joven alemana sobre la cual basaron la película “El exorcismo de Emily Rose” (2005). La iglesia pensaba se trataba de una posesión auténtica, mientras la ciencia apostaba porque se trataba de epilepsia.
La joven contaba tener visiones malignas (por ejemplo: rostros humanos que adquirían una apariencia monstruosa) y escuchar voces que la atormentaban. Los médicos estaban convencidos que padecía esquizofrenia así que le administraron unos fármacos, pero Anneliese empeoraba a ritmo acelerado. Insultaba, mordía y escupía a sus amigos y familiares, se alimentaba de insectos, se negaba a bañarse y se lastimaba a sí misma. En sus momentos de lucidez, aseguraba hallarse poseída por el demonio. Sus padres acudieron a la parroquia local para solicitar que la sometieron a un exorcismo.
Entre las reglas a seguir por el exorcista que se indican en el Rituale Romanum de la Iglesia Católica para expulsar al diablo se destaca:
· Colocar un crucifijo ante la vista del poseso o en sus propias manos. Ponerle reliquias y medallas. Pero no acercarle demasiado la Santa Hostia pues puede maltratarla.
· No dialogar nunca con el demonio y ordenarle que se limite a contestar a las preguntas que se le dirijan. No creerle si simula ser un ángel o un difunto.
· No dar crédito a lo que vea u oiga que hace o dice el poseso.
· Preguntar a la víctima el nombre y número de entes malignos que lo poseen.
· Preguntar en que época y por qué o cómo se produjo la posesión, así como el día y hora en que abandonará al poseso.
· Exorcizar con autoridad enérgica, insistiendo en las palabras que más hacen sufrir al poseso.
· Hacer la señal de la cruz en las zonas del cuerpo donde el poseso acuse alteración.
· Rociar con agua bendita el cuerpo del poseso.
· Repetir las frases y palabras que más atormenten al demonio.
· Deben estar presentes los familiares para que vean cómo reacciona el poseso y le sujeten firmemente. Deben rezar durante la ceremonia y ser rociados por el exorcista con agua bendita.
· No hay que dar pábulo a las trampas y engaños que usan los demonios para hacer creer que han abandonado al poseso. En ocasiones incluso les dejan comulgar o les muestran alguna visión beatífica.
· Hay que recurrir siempre al ayuno y la oración pues, según dijo Jesús (Mateo 17,20), hay una especie de demonios que no puede ser expulsada más que por la oración y el ayuno.
Inicialmente, el clero negó la autorización para realizar el exorcismo a Anneliese, pero el párroco Ernst Alt lo consiguió. En los rituales participaban familiares y amigos para expresar su apoyo. A través de la chica se manifestaron diferentes demonios: Caín, Judas, Nerón, alguna de las figuras más oscuras y tétricas de la historia sagrada.
Las sesiones se prolongaron por varios meses, y la joven sufría de una desnutrición que empeoró el verano 1976, por una neumonía. Para esas fechas, ni el exorcismo ni los tratamientos médicos habían surtido efecto.
Finalmente, Anneliese falleció el 1 de julio de 1976. Sus padres y el sacerdote que ofició su exorcismo fueron acusados de homicidio por negligencia, pues se decía, no habían seguido las recomendaciones de los médicos.
El Exorcista
¿Recuerdas estas imágenes de la película “El exorcista”? ¿Sabías que fue basada en hechos reales?
Los hechos ocurrieron en un suburbio en Washington, D.C. Robbin Doe, tenía 13 años y era hijo de una familia común. En enero de 1949, comenzó a escuchar arañazos detrás de las paredes de su casa y en el techo.
Los padres creyeron que se trataba de ratones, pero no hallaron rastros de esa plaga. En los días siguientes diversos objetivos cambiaban de lugar como movidos por manos invisibles, la cama del niño se sacudía violentamente, y el niño era arrojado al suelo.
Los familiares sospecharon de un fenómeno sobrenatural, porque días anteriores el chico había estado jugando con la ouija, y creyeron que podía tratarse del fantasma de su tía que había fallecido por aquellos días. Buscaron ayuda de dos ministros luteranos (la religión de la familia) y un rabino. Este se sorprendió al ver que el niño pronunciaba insultos en arameo la lengua muerta en que Jesucristo predicó.
Luther uno de los ministros , tomo el caso y fue testigo de sucesos anómalos, así que recomendó a la familia que consultara a un especialista médico y los puso en contacto con J.B Rhine, fundador del laboratorio de fenómenos paranormales en la universidad de Duke en Estados Unidos.
De pronto los fenómenos comenzaron a manifestarse con mayor intensidad, en el cuerpo del niño aparecieron marcas sangrantes de profundos rasguños que formaban letras y palabras extrañas. La familia recurrió entonces a la ayuda de la iglesia católica.
Robbin fue bautizado durante el rito de exorcismo que se extendió más de la cuenta, a causa de la resistencia demoniaca a aceptar el sacramento. El chico vómito, convulsionó, profirió insultos y hablo lenguas desconocidas. Al inicio, el exorcismo no fue útil, al contrario, las manifestaciones eran cada vez peores hasta alcanzar un clímax en el que el demonio se hizo presente. Pero finalmente, el espíritu maligno abandonó el cuerpo del niño, por la intervención de San Miguel Arcángel.
¿Cómo saber si una persona esta poseída?
La persona poseída se mueve en forma anormal, se agita sin control, gruñe con voz grave y pronuncia palabras en lenguas desconocidas de difícil comprensión con convulsiones. También es común, que si la victima pertenece a una comunidad religiosa le resulte difícil rezar, blasfeme contra los principios y figuras de fe y manifieste una repulsión sobre los objetos y todo lo que tenga que ver con ella.
Generalmente las posesiones tienen connotaciones negativas, y de acuerdo con las principales religiones de occidente, están asociadas a un poder maligno. Es por eso que suele llamarse posesiones satánicas. Para controlarlas se diseñó el exorcismo en el cual un ministro religioso con una cruz en la mano, agua bendita y otros amuletos exige al ente que abandone aquello de lo que se ha apoderado.
El exorcismo con otro nombre
No solo lo practica la iglesia católica, también existen muchas otras religiones que lo practican. Los evangélicos usan las oraciones rituales, Pare de Sufrir las liberaciones y así es como con diferentes connotaciones se realiza el ritual de expulsión espiritual.
Anggeli Fernández
Somos un espíritu, dotado de intelecto, viviendo en un cuerpo físico... Nuestros huesos, músculos y piel son sólo el vehículo de un conductor que a veces puede cambiar... A voluntad ó involuntariamente... Recibiendo a "alguien" bueno o malo... Pero relevándonos de nuestro cargo dominante al fin y al cabo... No hace falta tener Fe para creer... Si no pasa durante toda la existencia de una persona, no pasa... Pero cuando pasa, las evidencias están allí y nadie puede negarlas... Queda mucho que decir... Interesante tema y brillante exposición...
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